martes, 30 de abril de 2013

RICINO: " Un nombre con sabor a purga"

Nombre científico: Ricinus Communis
Familia: Euforbiáceas
Clase:Angiospermas dicotiledóneas



Esta planta era cultivada ya por los egipcios, que la utilizaban en la obtención de aceite para el alumbrado.
Se caracteriza por sus grandes hojas palmeadas, algunas de más de 80cm de diámetro, y de color rojizo las más jóvenes y verde violáceo las más antiguas. Las flores son de dos tipos: en la parte inferior nacen las masculinas, con filamentos ramificados y numerosas anteras, mientras que en la zona superior se desarrollan las femeninas, con el rudimento del fruto y un breve estilo dividido en tres ramitas bifurcadas cubiertas por abundantes papilas. El fruto, de forma globosa, aparece completamente erizado de espinas y en su interior encierra tres únicas semillas muy ricas en aceite.
El ricino crece en la vecindad de los pueblos y en los campos de cultivo abandonados, nunca lejos de apriscos o zonas en donde se encierre el ganado. No es una planta de origen europeo, sino de África tropical, pero fue importada a la región mediterránea hace muchos siglos y hoy en día está completamente naturalizada. En las zonas meridionales de España, Portugal e Italia se cultiva industrialmente para obtener aceite a partir de sus frutos.
Los usos que el hombre ha encontrado al aceite de ricino son innumerables, pues a pesar de que las semillas sean fuertemente tóxicas, el aceite refinado se vuelve completamente inocuo. Se emplea en la elaboración de jabones, para curtir pieles, en la industria de los barnices y como flexibilizante y abrillantador en el betún para el calzado. También, y dado que al arder apenas produce humo, se utiliza en la fabricación de velas para el alumbrado.

¿SABÍAS QUÉ...?

La utilidad más conocida del aceite de ricino es como purgante y como tal es sin duda uno de los mejores, aunque su sabor repugnante haga que no sea tolerado por la mayoría de las personas si no es enmascarado.

No hay comentarios:

Publicar un comentario